La seguridad en la carretera no depende únicamente de seguir las reglas, sino de cómo uno se adapta a las situaciones imprevistas y cambiantes del tráfico. La conducción a la defensiva y la correcta adaptación de la velocidad son esenciales para garantizar un viaje seguro para todos los usuarios de la carretera.
La conducción a la defensiva se refiere a una forma de manejar en la que se anticipan posibles situaciones de riesgo y se toman medidas proactivas para evitar accidentes. Los elementos clave de esta técnica incluyen:
Adaptar la velocidad es crucial para evitar accidentes. En situaciones arriesgadas, es necesario disminuir la velocidad para poder ceder el paso a otros, incluso si las normas no lo exigen. Es esencial recordar que adaptar la velocidad significa garantizar que todos en la carretera se mantengan seguros.
Las condiciones de la carretera y el entorno pueden variar constantemente. Ya sea por cambios en la visibilidad debido a la luz y sombra en una calle arbolada o por la aparición de un peligro oculto, como un niño corriendo detrás de un coche estacionado, es esencial adaptar la velocidad:
Recordar y aplicar estos conceptos es esencial para garantizar una conducción segura, no solo para usted sino para todos los usuarios de la carretera. La adaptación y la anticipación son las claves para evitar situaciones peligrosas y garantizar un viaje seguro para todos.
Revisa más información respecto de la velocidad al conducir en los siguientes artículos:
ceda el paso
no pase
balizas de acercamiento
curva a la izquierda
desnivel severo
generación pista derecha
largo máximo
altura máxima permitida